La historia de cómo llegó a mí la Casa Verde es una suma de gratas y sorprendentes "casualidades".
Durante mucho tiempo, al pasar por delante de ella, sentía que algún día estaría de nuevo “habitada”, y Zorsano se llenaría de actividad.
Compré la casa en 2005, con el asombro y apoyo de la familia, además de la dulce mezcla de sorpresa y alegría de los/as mejores amigos/as, llena de ilusiones y con muchas ideas para albergar allí un proyecto de intervención sociocomunitaria, con ganas de compartir y convivir con otras personas. Ahora colaboro como facilitadora y voluntaria en el equipo tan brillante que configura Iniciativa Zorsano.
En el aspecto laboral, ese mismo año, celebraba haber aprobado una oposición en el CFS de Lic. en Psicología, dedicando así mi actividad profesional al Gobierno de Cantabria.
Desde siempre me ha movido el deseo de encontrar oportunidades para descubrir diferentes contextos, formas de entender la vida, de aprender, de relacionarse, conocer nuevas culturas...
Sé que Iniciativa Zorsano es una tuerca minúscula dentro de un engranaje muy grande, sin embargo está haciendo su labor: trabajar para el logro del desarrollo del potencial humano, mediante acciones tendientes al crecimiento y prosperidad de las personas que conformamos los valles pasiegos y, en general, la verde Cantabria.
